Siempre me he preguntado si existe el destino, si tu vida fue trazada desde un comienzo o si te vas "haciendo camino al andar". También dudo de la existencia de la suerte, creo más en la Fe, pero ése es un cuento más personal. Y lo mismo me pasa con las coincidencias, aunque se confunde un poco con la idea de destino, porque no creo que todo pase por azar, pero tampoco creo que uno sea sólo una marioneta que cumple lo que ya fue programado para su vida.
Creer en Dios me ayuda bastante con esas dudas. Yo pongo mi vida en Sus manos, que es practicar lo de "hágase tu voluntad sobre la Tierra como en el Cielo" (mi frase preferida del Padre Nuestro... ¿se han dedicado a analizar frase por frase esa oración? Es tan simple y a la vez tan compleja...). Pero no crean que soy una "marioneta" (usando la misma palabra de antes) de Su voluntad, sino que siempre trato de pensar que todo lo que pasa en mi vida, lo bueno y lo malo, es por algo, no es por azar. Si sufro por algo, claro, me enrabio, lloro y todo, pero a la larga siempre trato de ver qué puedo aprender de esa experiencia. Cuando rezo porque algo me resulte, le digo "Pucha, ayúdame para que me salga esto como yo quiero, pero si no, hazme entender por qué no", es decir: "Hágase tu voluntad".
Este año ha sido muy rico en ese tipo de experiencias: en decisiones que he tomado y que han tenido buenos resultados, en incertidumbres que no me congelan, sino que me hacen tener más Fe y he tenido "suerte". Hasta ahora. Qué difícil sería mi vida si no tuviera Fe, qué difícil. Porque es la Fe la que me hace estar tranquila y no tener miedo. Y cuando los niveles de Fe andan bajos, ahí aparece toda la angustia y el temor y la incertidumbre.
Y es eso lo que quiero transmitir: ver la vida como algo trascendente, ya sea por una creencia religiosa o no, pero vivir con sentido, no preocuparse por tonteras superficiales que sólo sirven para darle más plata a los sicólogos (y varios otros "ólogos") y creer que todo pasa por algo y para mejor. Tu vida es tuya, nadie decide por ti, pero si a veces sientes que todo se te arranca y no sabes por qué, ten por seguro que son señales de que quizás vas por un mal camino.
Súper profundo este post, pero me sentía con la necesidad de compartir esta forma que tengo de ver la vida. ¿Saben por qué? Porque me ha hecho feliz. Y les aseguro que no hay nada mejor que ser feliz: aunque te falte la plata, aunque estés cansado, aunque estés inseguro o enfermo... creyendo, teniendo Fe, todo se "aguanta"... pero hay que estar atento a las señales. Y no perderse en los laberintos que uno mismo se pone.
¿Qué creen ustedes?
Siéntanse libres de comentar, criticar, discrepar y todo.
Se abre el debate...