Cuando cumplí 25 años me propuse
25 tareas. La número tres era (me cito): “Leer de nuevo los siete capítulos de Las Crónicas de Narnia”, aprovechando la edición de lujo que editorial Planeta lanzó con motivo de la película, de la cual sólo me faltan tres tomos (“El Sobrino del Mago”, “El Caballo y su Niño” y “La Última Batalla”, por siaca).
Si bien ya he leído bastantes veces los libros, ésta era distinta: la traducción. Siempre los cuatro niños fueron Pedro, Susana, Edmundo y Lucía. Ahora eran Peter, Susan, Edmund y Lucy. El Tejón del tomo II (que ahora es el IV) se llama Buscatrufas en vez de Cazatrufas y el barco en el que Caspian viaja hacia el país de Aslan con el ratón parlante Rípichip (Reepeecheep) se rebautizó “El Viajero del Alba” en vez de “El Explorador del Amanecer”.
Pero eran formalismos, no cambios de contenido. Hasta el tomo III (que ahora es el V: “La travesía de
El Explorador del Amanecer”). El barco pasa por la Isla Oscura y recoge a lord Rup, uno de los siete amigos del padre de Caspian en cuya búsqueda iniciaron el viaje. Esa isla es un lugar terrible, donde las pesadillas se hacen realidad. Gracias a la intervención de Aslan, los narnianos y el lord salieron sanos y salvos. Hasta acá la historia de editorial Andrés Bello (A.B) coincide con la de Planeta. Hasta acá.
Andrés Bello:

“
Entonces Lord Rup cayó de rodillas y besó la mano del rey.
–Señor –dijo–. Eres el hombre que más he deseado ver en el mundo. Te ruego que me concedas un favor.
– ¿De qué se trata? –preguntó Caspian.
– Que nunca me preguntes, ni permitas que otro lo haga, sobre lo que he visto durante estos años en la Isla Oscura.
– Es un favor muy simple, mi Lord –contestó Caspian, y añadió con un estremecimiento–: ¿Preguntarte? Claro que no.daría todo mi tesoro por no oírlo”.
Planeta:

“– Señor –dijo lord Rhoop, cayendo de rodillas y besando la mano del rey–, sois el hombre que más deseaba ver en todo el mundo. Concededme un favor.
– ¿Cuál es?
– No me volváis a traer jamás aquí –dijo él, y señaló la popa.
Todos miraron; pero vieron únicamente en brillante mar azul y un reluciente cielo, también azul. La Isla Oscura y la Oscuridad se habían desvanecido para siempre.
– ¡Vaya! –exclamó lord Rhoop–. ¡La habéis destruido!
– No creo que fuéramos nosotros –observó Lucy”.
La edición en inglés repite esta versión. ¿Por qué editorial Andrés Bello no lo hace? ¿Qué tiene de malo que la Oscuridad haya desaparecido? ¿Era menos “misterioso”?
Me siento engañada.